El vicealcalde de Elche y vicepresidente de PIMESA, Francisco Soler, acompañado por el gerente de la Empresa, Antonio Martínez, han presentado el proyecto de ejecución para la reforma de los 18 edificios y 302 viviendas, con un coste total de 13 millones de euros.
El gobierno municipal sigue adelante con el proyecto de rehabilitación y reforma integral del Barrio Porfirio Pascual, con el objetivo de que esté terminado en junio de 2026. La previsión es que las obras comiencen en noviembre de este año.
PIMESA ha presentado el proyecto de ejecución de los 18 edificios y 302 viviendas del barrio para su posterior aprobación en Junta de Gobierno Local, y en el Consejo de Administración de PIMESA del próximo mes se dará luz verde al pliego para licitar las obras que serán tramitadas de urgencia. De esta forma, la adjudicación se llevará a cabo tras el verano con la vista puesta en comenzar las obras en el mes de noviembre.
“Esto es un paso importante para el proyecto de rehabilitación integral de un barrio que supone un coste total de 13 millones de euros, de los que se han aprobados unas ayudas de 9,9 millones, además de la aportación de 1,95 millones del Ayuntamiento de Elche y el resto, alrededor de 1 millón de euros lo abonan los residentes de Porfirio Pascual”, ha señalado el vicepresidente de PIMESA.
La rehabilitación de los edificios asciende a 11,5 millones de euros, 1,2 millones de actuaciones de regeneración urbana y alrededor de 200.000 de la oficina de rehabilitación.
PIMESA ha comenzado a reunirse con las comunidades de propietarios para presentarles la actuación que estará finalizada en junio de 2026.
En el último Consejo de Administración de PIMESA se ha aprobado la contratación de la dirección técnica para la redacción del proyecto de reurbanización del barrio, que supone actuaciones de alcantarillado, red de agua potable, asfaltado o soterramiento de las líneas eléctricas.
El gerente de PIMESA ha señalado que el compromiso es finalizar la actuación en junio de 2026, de ahí que en la licitación se primará el plazo que ofrezcan las empresas interesadas en el proyecto y las condiciones de vida de las personas residentes del barrio durante la ejecución de las obras.
La rehabilitación incluye el refuerzo del aislamiento de las fachadas, la sustitución de las carpinterías exteriores actuales y doble acristalamiento y la instalación de placas solares fotovoltaicas en cubiertas para contribuir a la generación de agua caliente sanitaria.
Por otra parte, se llevará a cabo la eliminación de los daños estructurales producidos por la presencia de humedades, la centralización de los contadores de agua y electricidad en zaguanes o la sustitución de bajantes de saneamiento y pluviales, con la eliminación del fibrocemento existente.
Asimismo, habrá renovación de la iluminación y la instalación de ascensores en las fachadas traseras de los edificios.
La rehabilitación del barrio Porfirio Pascual supone un ahorro en el consumo de energía superior al 60%, que permitirá un uso más eficaz de los recursos, la sostenibilidad medioambiental y un ahorro económico para las personas residentes. Además de una mejora en las condiciones de seguridad, salubridad, habitabilidad y accesibilidad universal en los edificios y su entorno residencial.
Al mismo tiempo este proyecto implica unas modernas infraestructuras, equipamientos y servicios para el barrio, que se traduce en el desarrollo social y la calidad de vida de las personas residentes.